La Ciencia del Amor
- Kevin Garcia
- 17 sept 2020
- 1 Min. de lectura
Los dos impulsos electromagnéticos volvieron a activarse luego de la cosmovisión errónea de las situaciones inestables de la pieza fundamental de mi ritmo cotidiano, las alarmas distorsionadas despiertan mi alma como el renacimiento de pangea al nuevo mundo lleno de serotonina bendita en la luz del túnel que conlleva al nuevo camino de logros que con trompetas aturden a los falsos peatones adheridos a mi dulce piel.
El tiempo y es espacio ya no me importa con la nueva ciencia del amor, pensé que ya lo había perdido todo, pero la verdad el alma es lo que no perdí con la nueva química que mi cerebro y cuerpo responde al estar con esta damisela. La verdad solo ella y yo podemos entender nuestra situación de retroalimentación mutua, donde sólo ambos somos capaces de crear una nueva genética de amor que solo Dios a regalado la Sabiduría de nuestras mentes para poder conectarse durante todo el tiempo juntos, ya el amor es ciencia y no sufrimiento, donde el dolor no tiene lugar porque somos capaces de tomar las decisiones que no encamina a nuestro jardin del Eden que estamos cosechando para nosotros y para el pueblo que nos lleva en nuestros corazones.
Para ANIMA.

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